Construyendo durabilidad en cada grifo: así es como se fabrican los grifos de HANSA

Vea cómo los materiales de calidad, la experiencia en la fabricación y las pruebas exhaustivas marcan la diferencia

En el mundo actual, lavarse las manos con mayor frecuencia se ha convertido en nuestra nueva normalidad, como una simple medida higiénica para ayudarnos a mantenernos saludables. Este aumento en el lavado de manos significa que los grifos deben soportar un desgaste diario más duro, y la durabilidad de los grifos es quizás más importante que nunca.

El latón juega un papel importante en la durabilidad de los grifos.

El latón es un componente importante de los grifos y no cualquier latón. Debido a los diferentes niveles de acidez en el agua del grifo, la resistencia a la descincificación garantiza la durabilidad de cada grifo, sin importar dónde se use.

“En la planta de Rauma, Finlandia, se fabrican un promedio de 3000 grifos cada día. El uno por ciento de estos se revisan al azar antes de ser empaquetados y enviados a todo el mundo.” 

Marko Sundholm

Director de Ventas, Países Nórdicos

Un gran grifo comienza con un gran diseño y una planificación meticulosa.

Desde el diseño final simulado por computadora y los prototipos fundidos, el diseño del producto aprobado se dirige a la producción, que combina procesos automáticos y manuales.

Fases de producción de los grifos

• Construcción del núcleo
• Moldeado
• Aserrado
• Mecanizado
• Lijado
• Pulido
• Cromado
• Montaje
• Prueba
  
  

Cada paso de la línea de producción ofrece la oportunidad de producir un producto final diseñado y construido para durar.

Construcción del núcleo

El núcleo se refiere a los conductos del agua dentro del grifo. Durante la fundición, el núcleo se fabrica con arena fina y un agente endurecedor calentado en una caja de núcleos.

Los núcleos dentro del molde listos para la fundición.

Moldes

Un molde de los cuerpos del grifo está hecho de nuestras barras de latón especiales resistentes a la descincificación. Los moldes de la carcasa se sumergen en una solución de agua y grafito con un empleado, denominado "el lanzador", que coloca el núcleo dentro de los moldes después de quitar la arena suelta.

Luego, los moldes se sellan y se colocan en el horno de fundición en caliente, a través del cual fluyen tres toneladas de latón fundido hacia los moldes de la carcasa.

Barras de latón resistentes a la descincificación

Aserrado                                                                                                                          

Una vez que los moldes se han quitado y se han enfriado, el núcleo se retira de los cuerpos de los grifos haciéndolo girar en un molino equipado con bolas de metal. Los cuerpos de los grifos enfriados se cortan y se retiran también las partes innecesarias.

Mecanizado, lijado y pulido                                                                       

Colocados sobre una cinta transportadora, los cuerpos del grifo se mueven a través de procesos automatizados de mecanizado, lijado y pulido, lo que da como resultado un exterior suave. Luego, cada grifo se revisa a mano para garantizar que cumplan con los estándares más altos, arreglando cualquier ajuste menor manualmente.

“Las superficies del producto deben ser impecables antes del cromado, ya que el cromo es un material muy delicado, que no cubre, sino que resalta, incluso los errores más pequeños..”

Cromado

La etapa final de producción implica el cromado, dejando cada grifo con una superficie dura, brillante y resistente al desgaste. Un paso que requiere un cuidado especial, dice Marko Sundholm.

Esto se hace asegurándose de que los cuerpos de los grifos no se toquen con las manos desprotegidas, de modo que las huellas dactilares no aparezcan en la superficie.

Completando el puzzle

Los grifos también están construidos con piezas de plástico y composite, con los componentes visibles cromados. Trabajar con piezas de plástico puede ser más complicado que el latón, ya que están revestidas con una capa de cobre, luego una capa de níquel para proteger la superficie de la expansión térmica y, finalmente, con cromo.

El cromado tarda aproximadamente dos horas e incluye remojar y lavar los grifos hasta 40 veces. Después del cromado, cualquier marca como el logotipo de la marca se agrega con láser y los grifos se inspeccionan y ensamblan minuciosamente.

Pruebas

Cada grifo debe cumplir con una variedad de requisitos antes de que pueda salir al mercado. Por ejemplo, para probar el nivel de sonido, los grifos se colocan en una habitación de hormigón flotante insonorizada para garantizar que no superen un cierto volumen. El último paso de este proceso es la verificación al azar. De los aproximadamente 3.000 grifos que se fabrican cada día en nuestra fábrica de Rauma, realizamos controles aleatorios al 1%.

Ahora, nuestros grifos duraderos y diseñados por expertos están listos para ser empaquetados y enviados a los vendedores y a su destino final: en hogares, hospitales, escuelas y otros edificios en todo el mundo.